Los psicólogos no tenemos la bola de cristal. Sin embargo, estamos bastante entrenados en detectar gestos, patrones y dinámicas, que un poco parece que sí. Cuando una pareja se sienta en mi consultorio, muchas veces soy capaz de determinar desde muy pronto en las sesiones si hay material para poder trabajar o no. No es magia, es saber dónde mirar.

La reconocida psicóloga Nicole LePera, @the.holistic.psychologist , llevó esto más lejos y distinguió 7 claves que pueden predecir si una pareja tiene lo que hace falta para funcionar.

Es importante saber que no hace falta que estén todos presentes para considerar que una relación puede tener éxito. Pero se trata de aspectos importantes para la salud del vínculo y, sobre todo, para construir un futuro en común. Cuantos más te representen, ¡mejor!

Las parejas sanas:

1. Ponen límites al entorno: no hablan mal del otro con su familia de origen y tratan de no dejarse influenciar por lo que esta pueda querer u opinar. Ponen su relación por delante de lo que piensen los demás.
2. Son amigos: disfrutan la compañía del otro y los entusiasma poder compartir tiempo juntos. Son confidentes. 
3. Pasaron momentos difíciles: pocas cosas unen más que atravesar períodos complejos juntos. Esto aporta confianza y enriquece la historia en común. 
4. Dejan que el otro sea como es: no se pasan la vida intentando cambiar a la otra persona, tienen respeto y admiración por su pareja. Esta libertad logra que salga a flote lo mejor de cada uno. 
5. No agrandan los defectos del otro: entienden que cada uno tiene sus particularidades y no ponen el foco en eso ni son hipercríticos al respecto. 
6. No le temen a las conversaciones difíciles: ser abiertos a los temas más espinosos permite encontrar una base común. Trabajar en hacer que estas conversaciones sean accesibles (y no explosivas) también es importante. 
7. Pelean: sí, las parejas que funcionan también pelean. Pero no se hieren irremediablemente en el proceso, sino que son capaces de hacerlo con honestidad. Saben navegar en el conflicto y llegar a la orilla con más claridad.

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